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miércoles, 1 de abril de 2015

"YO NO VINE AL MUNDO" SEMANA SANTA

No podemos pasar por alto el carácter profundamente penitencial que ha tenido desde siempre la Semana Santa, lo importante en estos días no es el recordar con tristeza lo que Cristo padeció, sino entender del porque murió y resucitó...



-Yo no vine al mundo para condenarte, pero si mi amor tú vida se extravía en temores y prejuicios...

-Yo no vine al mundo para lastimarte, pero sin mi amor tu vida es capaz de herirse en egoísmo.

-Yo no vine al mundo para sentenciarte, pero si mi amor tú te arrebatas la esperanza de intentar aprender a crecer y amar...

-Yo no vine al mundo para castigarte pero si mi amor tu castigas tu corazón con mil afanes...

-Yo no vine al mundo para abandonarte, pero tú te alejas de mi amor con tantas distracciones y menosprecios...

-Yo no vine al mundo para burlarme de tu dolor, pero sin mi amor no sabes valorizas mi sacrificio por ti en un madero...

-Yo no vine al mundo para llenarte de religión, pero sin mi amor no puedes aprender a amar  al prójimo como a ti mismo...

-Yo no vine al mundo para enajenarte, pero sin mi amor no sabes ayudar al que sufre lo que una vez tu superaste....

-Yo no vine al mundo para que llores por mi muerte, sino para que vivas por mi resurrección...

-Yo no vine al mundo para señalar errores, sino para que aprendas a convertirlos en virtudes...

-Yo no vine al mundo para dar espectáculo de crucifixión, sino para que tu crucifiques lo negativo en tu propio carácter que no te deja ser feliz...

-Yo no vine al mundo para quitarte egoistamente nada, sino  para enseñarte a dar la vida por lo que se ama...

-Yo no vine al mundo para quedarme en una cruz colgado, sino para caminar contigo la vida que no sabes vivir por ti solo...

-Yo no vine al mundo para que tengas una semana de vacaciones o una cena suculenta, sino para que alcances una experiencia espiritual que transforma tu vida y tu conciencia...

-Yo no vine al mundo para enseñarte a morir, sino para que aprendas a vivir imitando mi amor sanador y salvador...

Jesús.

Desconozco el autor del texto...

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